¿En qué va y qué falta en
la política pública nacional, departamental y municipal de familia?
|
La
ley 1361 de 2009, de Protección Integral a la Familia, ordenó a los entes
territoriales del país, nación, departamento y municipios y a la sociedad civil el formular las
políticas, planes, programas y proyectos dirigidos a fortalecer el desarrollo y
bienestar de las familias colombianas. Una
política pública es el resultado de una acción convergente y corresponsable
entre el Estado y actores de la sociedad civil.
La importancia de una política pública es que establece lineamientos,
directrices y recursos para intervenir una realidad social que considerándose
compleja quiere ser mejorada para el bienestar de una población
determinada. Con respecto a la política
pública veamos en que va y que falta por hacer:
- Ministerio de Salud y Protección Social:
La
ley 1361 dio al Ministerio un año de plazo para el diseño y elaboración de la
política de apoyo y fortalecimiento a la familia; pasado el año y al no
cumplirse el mandato de la ley, un grupo de organizaciones sociales de Medellín
dirigió un derecho de petición al Ministerio para su ejecución. El ministerio contrato con la doctora Ligia
Galvis, reconocida experta en el tema, la coordinación técnica del documento,
el cual implicó la conformación de una Mesa Técnica Nacional de Familia. Tres años después aún no se dispone de un
texto definitivo y oficial debido a objeciones de la Procuraduría General de la
Nación. Aún están pendientes de realizar el Plan de
Acción y el documento CONPES sobre familia; prerrequisitos esenciales para la
concreción de la política nacional de Familia.
El
Ministerio ha liderado la celebración del Día
Nacional de la Familia, tal como lo ordena la ley 1361, ha realizado,
además, dos Foros Nacionales de Familia y ha iniciado una agenda de consulta
mediante foros regionales. Muy lento va
el proceso
- Departamento de Antioquia
La
mayoría de los departamentos del país siguen sin dar cumplimiento a la ley
1361. Antioquia y Santander son los departamentos que le han dado cumplimiento
y disponen ya de un documento marco de
la política de familia en sus respectivas jurisdicciones.
Mediante
un convenio de asociación la Gobernación de Antioquia y la Fundación Bien
Humano llevaron a cabo el trabajo de la elaboración del documento de la
política en las 9 subregiones del departamento.
Si bien se instaló la Mesa Departamental de Familia aún no se ha
socializado y divulgado, en forma suficiente, el documento del marco
estratégico de la política pública para las familias antioqueñas. Tres acciones figuran en la hoja de ruta: la
aprobación de la ordenanza departamental,
la elaboración del plan estratégico y la adecuación institucional en el
organigrama de la gobernación para darle un espacio y un referente a los
planes, proyectos y programas del departamento a las familias.
- Municipios
Al
igual que la mayoría de los departamentos, la mayoría de los municipios del
país, especialmente los pequeños, están rezagados en el cumplimiento de la ley
1361. Las tres principales ciudades:
Bogotá, Medellín y Cali cuentan ya con política, planes, programas y
presupuesto. La Procuraduría General de
la Nación ha inquirido, como es su obligación, a los alcaldes a ocuparse del tema. Lo que preocupa es que los municipios no han
apropiado recursos para la formulación de la política local de familia en sus jurisdicciones,
y sin recursos, se corre el riesgo de que por cumplir con la ley y los exhortos
de la Procuraduría se formulen políticas de familia “desde el escritorio de los
funcionarios acudiendo al copiar y pegar”.
Políticas así elaboradas son descontextualizadas, inocuas e inoperantes.
Para el cumplimiento cabal de la tarea los municipios requieren del
acompañamiento y la asesoría conceptual y técnica de expertos del ICBF y los
funcionarios departamentales, tarea que no se está haciendo, incluido el departamento
de Antioquia.
Las
familias no viven en las dependencias del Ministerio de Salud y Protección
Social, ni en las sedes administrativas de las gobernaciones. Las familias viven, trabajan, nutren, educan, son felices, se enferman y cuidan en los territorios de los municipios. La importancia para un municipio de contar
con una buena política de familia es que está, por derecho propio, tiene que
ser incluida en el plan cuatrienal de desarrollo de cada administración; estar
en el Plan es contar con recursos reales y definidos para desarrollar los
objetivos y finalidades de la política de familia. Ya no puede seguir quedando al capricho,
gusto e interés del alcalde o la primera dama.
Es en los municipios, en el casco urbano y sus corregimientos y veredas
que las familias pueden fortalecerse como agencias de formación del ser humano
y como sujeto político y colectivo de derechos.
No
vemos desde la nación, los departamentos y los municipios un trabajo coordinado
y articulado tal como lo ordena la ley 1361.
Cada uno de los entes territoriales “tira para su lado de la cobija” sin
importarle lo que está pensando y haciendo la contraparte. No se
han establecido espacios de encuentros, agendas, o acuerdos entre ellos. En
este sentido hay una incapacidad manifiesta y una falta de voluntad y
responsabilidad política.. Y todo lo anterior está sucediendo en el Año
Internacional de la Familia, cuando, por fin, el tema de familia empieza a
posicionarse en la agenda política y pública del país, cuando ya no quiere ser
más la “cenicienta” de la política social.
La oportunidad, el momento, la coyuntura es única, no podemos
desaprovecharla.
Hay
que reconocer los avances legislativos, la ley no resuelve por si sola las
problemáticas sociales pero sin la ley tampoco es posible empezar a aportar a
su solución. La política de familia y
para las familias no son una política más: familia, al igual que género, son
transversales a toda política poblacional.
Hacemos este llamado de atención a las entidades y a los servidores públicos para que cumplan con la
debida concurrencia de límites y competencias en lo ordenado por la ley 1361.
En
Colombia, cinco años después de expedida la ley de Protección Integral a la
Familia, va muy lento, a paso de tortuga y con serios interrogantes, el proceso
nacional, departamental y municipal de la formulación de la política de
familia. Mientras tanto la realidad de las familias colombianas va a otro
ritmo: es diversa, dinámica y cambiante.
Desde
esta tribuna de la sociedad civil seguiremos participando, observando e
informando…
Luis
Julián Salas Rodas
Director
Ejecutivo
Fundación Bien Humano
Lo invitamos a visitar nuestra
página web
|
|
No comments:
Post a Comment